Emiliano “Dibu” Martínez atajó dos penales y Aston Villa pasó a las semifinales de la Conference League
Emiliano Martínez está destinado a hacer historia y a quedar en el foco de la escena. Aston Villa derrotó a Lille por 4 a 3 en la definición por penales del duelo de vuelta de los cuartos de final de la Conference League. Y el Dibu volvió a lucirse en una materia de la que es experto y detuvo dos penales, el primero y el último. Pero su decisiva actuación se dio bajo un clima hostil: no la pasó nada bien, con el sedimento de la inolvidable final de Argentina vs.
Francia, en el Mundial de Qatar 2022. En el tiempo regular, que concluyó 2 a 1 para el local, el argentino recibió dos goles en un estadio cuyos hinchas le hicieron sentir el rigor. Tuvo un recibimiento complicado en el estadio Pierre-Mauroy, en Francia. Soportó insultos y una silbatina constante desde que empezó hasta que finalizó el encuentro.
En un escenario ideal para el arquero argentino, atajó el primer penal e hizo silenciar a la gente. Discutió con el árbitro y volvió a ser amonestado. Vale destacar que las amonestaciones (tarjetas amarillas) a los jugadores y oficiales durante un partido (incluida la prórroga) no se tendrán en cuenta en la tanda de penales, dado que esta no forma parte del partido.
La instancia por penales continuó y tocó el turno del último disparo para Lille. Benjamin André, el capitán de los locales, que había convertido el segundo tanto del partido, tenía en sus pies la posibilidad de estirar la serie. Sin embargo, apareció el héroe de la noche. Emiliano Martínez le adivinó la intención, tapó el penal y salió a festejar. Festejo contra la tribuna, se abrazó con sus compañeros y bailó como en Qatar 2022. Un guiño a la historia que él mismo escribió. De este modo, Aston Villa avanzó a las semifinales de la Conference League y allí espera al ganador de Olympiakos de Grecia y Fenerbahce.
Era la primera vez que el marplatense se enfrentaba a una definición por penales tras la recordada final del Mundial de Qatar 2022, donde fue la figura atajando, también, dos disparos.
En el duelo de ida, que se jugó en el Villa Park de Birmingham y en el que el local ganó 2 a 1, los hinchas de Lille que se trasladaron hasta Inglaterra ya le habían hecho sentir el rigor a Martínez. Cada vez que recibía la pelota o la tenía entre sus manos, era silbado por esos fanáticos. Y en el desquite no fue la excepción. Cuando el marplatense se dirigió a defender el arco donde se encuentran los hinchas más ruidosos de Lille, la lluvia de chiflidos fue directa para el arquero. También algunos insultos.
En la previa de este choque, desde Lille habían advertido que esto iba a suceder, debido a que Dibu es el “enemigo público número 1 en Francia”. Así tituló el medio, Get French Football News, en una nota vinculada al arquero. También le advirtieron que podía esperar una recepción hostil por parte del Stade Pierre-Mauroy”, ya que los fanáticos locales tendrían “una oportunidad real de expresar algo de su enojo anterior”.
En el análisis de la nota expresaron: “Su actuación por sí sola lo habría convertido en una figura despreciada en Francia, pero fue su reacción durante las celebraciones lo que cimentó su reputación vilipendiada y rápidamente le valió el apodo de ‘el argentino más odiado en Francia’”. Ese título está emparentado a un titular que el reconocido canal de televisión local, TF1, puso cuando el arquero bromeó con un muñeco de Kylian Mbappé durante las celebraciones del título mundial por las calles de argentina: “Gesto obsceno, muñeco Mbappé… Emiliano Martínez, el argentino “más odiado” en Francia”, dijeron por entonces.
Cuando el partido comenzó y el local tuvo una llegada al área defendida por Emiliano Martínez otra vez se hicieron notar los hinchas locales. Además, cuando se jugaban nueve minutos, tuvo una intervención en la que debió esforzarse para salvar a su equipo. Además, Dibu fue la figura de su equipo en el duelo de ida, disputado el jueves pasado en Inglaterra. Sobre todo se lució en la primera etapa, cuando salvó a su equipo frente a claras ocasiones de gol de los franceses, que contaron con un fuerte apoyo a pesar de haber sido visitantes, y los hinchas de Lille no dudaron en silbar y abuchear al argentino cada vez que tenía la pelota entre sus manos.
A los 16 minutos de la primera parte, los locales, que eran mucho mejor, abrieron el marcador. Yusuf Yazici agarró la pelota de primera, con pierna zurda y la colocó contra un palo, para establecer el 1 a 0 en el partido y el 2 a 2 en la serie. Con este resultado, el partido se iba al un alargue.
A los 25, Dibu fue protagonista por una salvada impresionante. Tras una pelota parada, el arquero argentino le detuvo un cabezazo a Benjamin André con la cara. Tras la intervención, debió ser atendido por el cuerpo médico porque quedó muy sentido, incluso hasta le costó ponerse de pie. Algunos minutos después volvió a mojarse el rostro, visiblemente colorado por el impacto.
Cuando promediaban 39 minutos de la primera etapa, tenía que realizar un saque de arco. Al demorar por hablarle a sus compañeros, el árbitro del partido Ivan Kruzliak fue corriendo hasta la posición del arquero, haciendo un conteo con sus dedos, interpretando que estaba haciendo tiempo en varias jugadas y decidió sacarle la tarjeta amarilla. El público local celebró el fallo del juez.
No la pasaba nada bien Aston Villa y los locales mantuvieron la paciencia. Y fue a los 22, que Lille se puso 2 a 0 en el marcador. Tras un córner desde la izquierda, Benjamín André le ganó a todos en las alturas, en el primer palo, y de cabeza amplió el marcador. Con ese tanto, los franceses se metían a las semifinales de la Conference League. Sin embargo, Aston Villa empezó a atacar, para poder igualar la serie y lo consiguió. Lucas Chevalier, arquero del local salió a buscar un centro y se chocó con Nabil Bentaleb. Quien aprovechó el balón perdido fue Matthew Cash que descontó a los 42 de la segunda etapa. En una de las últimas jugadas, Dibu tapó a puro reflejos un cabezazo que pudo ser el tercero de los locales y la eliminación de los ingleses.
En el alargue, ambos buscaron el partido. Un gol de cualquiera de los dos, los clasificaba directo a la próxima instancia, lo cierto es que quien se lució fue el arquero Lucas Chevalier. Luego de equivocarse en el descuento de Aston Villa fue protagonista de grandes atajadas que permitieron que la serie se defina en los penales. Allí fue cuando Martínez volvió a ungirse en el gran artífice de la victoria y héroe de la jornada.
La Nación