“Me sentí monstruosa porque no quería tener hijos”
El número de mujeres que están optando por no tener hijos va en ascenso al tiempo que la tasa de natalidad en el mundo se desploma.
Aunque sus razones varían desde las dudas por el cambio climático hasta preocupaciones financieras y complicaciones de salud, las que optan por ser «libres de hijos por decisión» dicen que la sociedad aún no las acepta, frecuentemente dejándolas con una sensación de aislamiento.
La BBC habló con integrantes de Bristol Childfree Women (Mujeres de Bristol sin hijos), una organización social en esa ciudad en el oeste de Inglaterra que tiene más de 500 afiliadas, fundada por mujeres para mujeres que han decidido no tener hijos.
A pesar de que Caroline Mitchell siempre supo que nunca quería tener hijos, no estaba preparada para lo difícil que sería llegar a la «edad reproductiva».
La mujer de 46 años, que vive con su esposo en Brislington, Bristol, dijo que pese a que nunca le molestó cuando era más joven, no había anticipado el torrente de preguntas personales que enfrentaría cuando sus amistades y conocidas empezaron a tener hijos.
«Me sentí como un monstruo debido a eso», expresó.
«Sentí como si mi perspectiva y mi opinión simplemente no fueran aceptables».
En opinión de Caroline, la sociedad está programada para la maternidad.
«Te das cuenta de que quedas excluida de mucho en la vida», dijo.
«Me queda muy difícil conocer personas, porque todo gira en torno a las mujeres que te encuentras en las puertas de las escuelas o los clubes de escritura para madres».
Caroline opinó que algunas veces las mujeres con hijos piensan que «el mundo entero» está hecho para las mujeres sin hijos.
“En realidad es muy excluyente”, señaló.
Muchas en su círculo de amigas tienen hijos y aunque conscientemente nunca han hecho nada para hacerle sentir diferente, dice, el hecho de que «todas estén haciendo una cosa» y ella esté haciendo otra es «bien difícil».
Caroline se siente «100% segura» y «muy cómoda» con su identidad, pero reconoce que, en algunas ocasiones, se ha «angustiado» sobre su decisión.
Explicó que esto se debe a la «expectativa cultural» de lo que es normal y el concepto de que, si eres una mujer, tener un hijo es «lo que debes hacer naturalmente».
Un creciente número de comunidades alrededor del mundo están optando por no tener hijos. En Corea del Sur y otros países asiáticos ha llegado a un punto crítico.
Cifras oficiales en Reino Unido divulgadas en 2022 muestran que un número récord de mujeres están alcanzando la edad de 30 sin hijos.
Más de la mitad (50,1%) de las mujeres en Inglaterra y Gales nacidas en 1990 no tenían hijos cuando cumplieron los 30 en 2020, la primera generación en hacerlo, según la Oficina de Estadísticas Nacionales.
Megan Stanley, que viene de Oxfordshire y vive en Bristol, estaba tan segura de su decisión de no ser madre que ha estado intentando someterse a una esterilización desde los 19 años.
Cuando se trata de los dolorosos períodos de la regla, Megan dice que es «cruel» tener que aguantar el «sufrimiento cada mes de una función corporal» que ella siente que no necesita.
Sin embargo, la mujer de 31 años señaló que se topó con un obstáculo tras otro.
«Los médicos decían ‘todavía eres demasiado joven’ o ‘podrías cambiar de parecer'», dijo.
Lo más cerca que Megan llegó de lograr su cometido fue a los 29 años, cuando tuvo una cita con el cirujano.
«Tenía todo preparado; mi historial médico, todos mis argumento. Hasta tenía un testimonio de la terapeuta que estaba viendo. Había hecho un esfuerzo total», aseguró.
No obstante, tan pronto el ginecólogo le preguntó sobre su estado civil le negaron la autorización.
«En ese momento llevaba una relación de tal vez tres meses con quien ahora es mi pareja», dijo Megan.
Le afirmó al doctor que su pareja definitivamente tampoco quería hijos y que ya se había hecho la vasectomía.
«Es mi cuerpo»
Según Megan, el doctor le dijo que si su pareja se había hecho la vasectomía, «entonces no necesitas que te hagamos esto, ¿verdad?».
Fue cuando Megan se dio cuenta de que no había «escapatoria» y que «simplemente no le harían [la operación]».
«¿Por qué lo que sucede con mi cuerpo depende de lo que él le haya hecho al suyo?», arguyó.
«He llegado a un punto ahora donde anhelo la menopausia. Eso es lo que ansío».
Caroline cree que la mujeres sin hijos podrían ser «cómplices» en mantener el estatus de las expectativas culturales.
«No hablamos al respecto, así que todavía perdura la idea de que es lo que todo el mundo hace», afirmó.
«La maternidad está en todas partes a todas horas, una agresión constante».
Explicó la dificultad de no encajar con la «norma de la sociedad» y que, a veces, hubiera deseado ser «diferente».
«Mi vida hubiera sido más fácil en algunas maneras», comentó.
No obstante, para muchas mujeres, cualesquiera que sean las decisiones que tomen, parecen autoflagelarse al respecto y «no parecen aceptar las opciones de las demás», añadió Caroline.
Fiona Powley dijo que ella sabía que no quería ser madre desde la edad de 12 años, después de ver a su propia mamá teniendo dificultades con la maternidad.
«Simplemente pensé que la maternidad no se veía muy divertida», contó.
A sus 49 años, Fiona ahora lidera el grupo de Mujeres de Bristol sin hijos y, aunque actualmente está pasando por los síntomas de la menopausia, no siente «pánico» de no haber aprovechado su situación para reproducirse.
«Me siento muy a gusto», afirmó.
«Egoísta»
Irónicamente, cuando lo piensa, Fiona cree que realmente pudo «haber hecho un buen trabajo en la crianza de hijos», pero que nunca tuvo «suficientes ganas».
Sin embargo, como Caroline y Megan, indicó que muchas personas que conoce por primera vez reaccionan negativamente cuando les dice que optó por no tener hijos.
«Te dicen que te arrepentirás. ¿Cuál es el motivo de existir? Si no tienes hijos parece que no eres válida como mujer», comentó Fiona.
Incluso la han tildado de «egoísta» y han cuestionado quién la irá a cuidar cuando envejezca.
«Es casi como si la gente se sintiera incómoda», agregó.
«Probablemente se deba a que nunca se les ocurrió que ellas también tenían una opción».
Megan se puede identificar con eso.
En el pasado, la reacción a su decisión de no querer tener hijos ha sido bastante «cruda», expresó.
Afirma que algunas personas la han retratado como «odiosa con los niños o una malvada».
«Me parece que el no querer hijos es solo algo innato de quien soy», aseguró.
Fiona señaló que hay muchas razones por las que la gente decide no tener hijos.
En retrospectiva, cree que sus propias razones fueron «probablemente poco saludables», pero sabe que no va de pronto a despertarse hecha una anciana sintiéndose «amargada y arrepentida».
«Es cuestión de elección»
Caroline aludió a que hubiera sido una «madre resentida», añadiendo que hay una «gran cantidad de ventajas» de no tener hijos, como concentrar su tiempo en la relación con su esposo y en sus hobbies.
Megan coincide.
«Se puede encontrar mucha felicidad en no tener hijos», aseguró.
«No es todo sobre la libertad y el dinero. Es cuestión de elección».
BBC Mundo