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Ajedrez: Faustino Oro entre los 4 mejores, y con posibilidades de ganar el torneo

La 99° edición del Campeonato Argentino Absoluto de ajedrez tendrá este viernes 6 de diciembre una jornada memorable, porque cuatro de los doce finalistas llegaron a la última ronda con chances de ganar el torneo. Y uno de ellos es Faustino Oro, el maestro internacional más joven de la historia.

Sí, el genio precoz de 11 años llegó a la rueda final con chances de ser campeón argentino. Una absoluta locura, que marca el talento y el futuro promisorio que le espera, en la previa a su participación junto a Ilan Schnaider en el Mundial de partidas rápidas y blitz, en Nueva York, entre Navidad y Año Nuevo.

El gran maestro Sandro Mareco, número 1 del país, entabló en la penúltima ronda con blancas en 32 movidas frente al GM Federico Pérez Ponsa y mantuvo el liderazgo con 7,5 puntos en 10 ruedas. Marcha invicto en el torneo, en busca de su segundo título nacional, y este viernes jugará con negras ante el MI Pablo Acosta, quien viene de entablar con el GM Diego Valerga.

El gran maestro Fernando Peralta, pentacampeón argentino, le descontó medio punto a Mareco gracias a su victoria en gran forma con negras ante Gaspar Asprelli. Ahora suma 7, está invicto y este viernes deberá jugarse la chance a todo o nada justo con blancas ante Faustino Oro. Una partida para esperar con ansias.

Fausti es uno de los que marcha con 6,5 unidades en el tercer lugar, junto al gran maestro Diego Flores, el único que lo venció en este campeonato. El niño refutó con blancas un sacrificio de caballo del maestro FIDE Germán Spata y remató jugando todas las mejores con una destreza envidiable.

«Lo que lo destaca entre todos los niños que juegan es su solidez práctica: pone bien las piezas en cada lugar, es paciente y castiga una mala jugada rival. Vive el ajedrez como un juego y le encanta», le comentó a Clarín el maestro internacional Mario Villanueva, uno de sus entrenadores.

Apenas terminó su partida, como Spata debía volver a La Plata, Faustino analizó la partida junto a Villanueva. La capacidad del pibe quedó en evidencia cuando mencionó cada variante que había pensado ante cada posición.

En la mesa de al lado, sonreían el maestro internacional Lucas Coro y el gran maestro Leandro Krysa, quienes analizaban sus tablas. Y Fausti se prendió a cada pedido de selfie y hasta le firmó un libro a un niño colombiano.

Con información de Clarín

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