El escándalo de Insaurralde continúa: ordenan un allanamiento en el lujoso club de polo donde se casó con Jésica Cirio
El juez federal Ernesto Kreplak ordenó realizar una batería de medidas de prueba para avanzar en la causa en que se investiga por supuesto enriquecimiento ilícito al exintendente de Lomas de Zamora Martín Insaurralde. Esas acciones incluyeron un allanamiento en un lujoso club de polo de Tristán Suárez, en la provincia de Buenos Aires, donde el también exjefe de Gabinete de Axel Kicillof realizó en 2014 un fastuosa fiesta de casamiento con Jésica Cirio, hoy su exesposa.
El juez dispuso las medidas a pedido del fiscal federal de Lomas de Zamora, Sergio Mola, y de su colega de la procuraduría antilavado, Diego Velasco. Se dispuso el procedimiento para recabar la información con un allanamiento en caso de que no sea entregada de inmediato, en el club de campo La Manea Polo Club, a la salida del kilómetro 41 de la autopista Cañuelas hacia Tristán Suárez.
Las autoridades buscaron la factura de alquiler del predio y servicios que hayan contratado los novios con la empresa; la persona física que pagó los gastos, los registros contables, contratos y anotaciones que hablen de las empresas proveedoras del evento, quién fue la wedding planner, quién hizo el servicio de catering, la instalación de carpa, los arreglos florales, la música, las luces y los suvenires.
Asimismo, se ordenaron otras 18 medidas de prueba que incluyen la ampliación de los exhortos internacionales enviados a los Estados Unidos y España, y el envío de un nuevo pedido a Suiza para rastrear los viajes de Insaurralde a esos países y, fundamentalmente, a los dueños de la tarjeta de crédito American Express, emitida en Florida, que fue usada para pagar la mayoría de los pasajes aéreos. Los pagos se hicieron a la empresa Forest Travel con esa tarjeta.
Por eso, la Justicia pidió a los Estados Unidos que averigüe en Forest Travel Agency Inc., con oficinas en 2420 NE Miami Gardens Drive, Suite 301, toda la información relativa a quiénes pagaron los viajes por Europa y los Estados Unidos realizados por el exfuncionario.
La fiscalía antilavado dio por probado el enriquecimiento de Insaurralde al calcular que, desde 2021 a 2023, gastó más de 100.000 dólares en sus viajes en business cuando su sueldo ascendía a 1800 dólares al mes. En cuanto al exhorto a Suiza, se busca determinar quién pagó la cuenta del Nobu Hotel donde se alojó Sofía Clerici antes de mudarse a la lujosa villa de Marbella donde convivió cinco días con Insaurralde, en los días previos al viaje en el yate Bandido por el Mediterráneo. Clerici se alojó con su hermana Renata y la Justicia quiere saber quién le pagó a la agencia de viajes MTC Group SA, con sede en 20, Route de Beaumont, Fribourg 1709, Suiza, por ese alojamiento.
Además, el juez pidió una exhaustiva radiografía financiera de la firma Kideza SRL, que coloca luminarias en municipios del conurbano, y datos las firmas The Bear Teddy, Jésica Cirio SA YOU SA y JCI Group, que serían de la expareja.
Sin disponer el allanamiento, como pidió el fiscal, el juez le dio más tiempo a la empresa GEI Grandes Emprendimientos Inmobiliarios SA y a la administración del barrio Fincas de San Vicente – Club de Chacras, donde vivía Insaurralde, para que brinde datos sobre quién pagó y cómo las expensas desde 2006 a la actualidad.
Asimismo, Kreplak dispuso que el Tribunal de Tasaciones valúe los inmuebles atribuidos a Insaurralde, Cirio y Clerici, y que las empresas de criptomedas y fintech informen si es que los investigados tienen inversiones allí.
El juez mandó levantar el secreto fiscal de Clerici. Y encargó averiguar todos los datos de la firma Nogoyá 3333, ya que la casa donde vivía la modelo, en el barrio “Los Lagos” de Nordelta, fue adquirida por medio de una cesión de derechos a la empresa, donde la presidenta era Clerici.
Kreplak citó además como testigos a los que le vendieron autos a Cirio y a la exvicepresidenta de la UIF María Eugenia Talerico, y pidió informes sobre empresas que fueron proveedoras de servicios de la Municipalidad de Lomas de Zamora y que aparecen ligadas a las propiedades donde vivió Insaurralde.
Para La Nación, Hernán Capiello