El obispo de Santiago del Estero fue designado cardenal por el Papa Francisco
Vicente Bokalic es el obispo de Santiago del Estero. Desde este domingo, también cardenal. Podrá ser, a partir de ahora, electo como papa y elegir el próximo Sumo Pontífice en un eventual cónclave.
Fiel a su compromiso de acercarse a las periferias del mundo, el papa Francisco ha nombrado como cardenal al arzobispo de la diócesis más antigua de Argentina. Sorprende que, hasta ahora, Jorge Ignacio García Cuerva no haya sido reconocido como cardenal, una distinción que tradicionalmente recibía el arzobispo de Buenos Aires, como sucedió con Jorge Mario Bergoglio y Jorge Aurelio Poli. Entre los 21 nuevos cardenales que serán consagrados el 8 de diciembre en el Vaticano, su nombre no figura. Con este nombramiento, Santiago del Estero vuelve a ser noticia este año, ya que el pasado 7 de septiembre en un acto de reparación histórica, se trasladó la sede primada de la Iglesia de Argentina a Santiago del Estero, y el pasado 11 de febrero el papa Francisco canonizó a la primera mujer santa “Mama Antula”, oriunda de esta provincia.
Vicente Bocalik, conocido por sus cercanos como “Vinko”, nació el 11 de junio de 1952 en Lanús, como hijo de inmigrantes eslovenos. Estudió en el Colegio Parroquial San José de Pompeya de Lanús y en el Colegio Apostólico de Escobar. Posteriormente, ingresó al Seminario Mayor de la Congregación de la Misión de San Miguel, donde realizó estudios de Filosofía en el Colegio Máximo de San José y de Teología en la Universidad Católica Argentina (UCA). Fue obispo auxiliar de Buenos Aires y desde 2013, obispo de Santiago del Estero, y a partir del 22 de julio es arzobispo primado de la diócesis santiagueña.
Este nombramiento refleja una vez más el estilo pastoral del papa Francisco, quien busca descentralizar el poder eclesial en Argentina, como ya lo ha hecho en otros países, como en el caso de Milán.
La misma situación que pasó en Argentina se presentó en septiembre de 2022 en Italia con el arzobispo de Milán, Mario Delpini, que no fue nombrado como cardenal. El papa Francisco prefirió nombrar al arzobispo de Como, Oscar Cantoni. El arzobispo milanés hizo una chistosa protesta: “Tampoco el Padre Eterno sabe lo que piensan los jesuitas. El papa habrá pensado que esos presumidos de Milán ni saben dónde está Roma y es mejor que no se involucren demasiado en las cosas del gobierno de la Iglesia Universal”, dijo. Además, agregó una motivación futbolística sin mucho tino: “El papa es hincha de River (en realidad es hincha de San Lorenzo) que nunca ha ganado nada, entonces habrá pensado que los de Como podrían estar un poquito más en sintonía, ya que la Copa está en Milán”. De lo futbolístico, Delpini sacó una conclusión Bergogliana y se dirigió al Cardenal Cantoni de Como: “Vos sostenés a los perdedores, estés de la parte de los que son más débiles, de los que pierden”.
A diferencia de esta postura, García Cuerva se ha mostrado muy favorable a la decisión del Papa de trasladar la primatura de Buenos Aires a Santiago del Estero, resaltando la verdad histórica. En sus palabras: “Elegimos también la fraternidad porque, aunque algunos vieron aquí una intención de desvalorizar a Buenos Aires, en realidad lo que elegimos es la fraternidad. No nos van a pelear a Buenos Aires con el interior, que se queden con las ganas. Somos hermanos, somos Iglesia, elegimos la fraternidad, elegimos la cultura del encuentro, elegimos tender puentes, en definitiva, elegimos a Jesús, elegimos entre todos construir su proyecto de vida”, así se expresó el 25 de agosto en la Catedral Metropolitana.
La lista de los 21 nuevos cardenales designados por el papa Francisco incluye también obispos de diócesis que no corresponden a ciudades capitales, lo que refleja su visión de dar protagonismo a las periferias del mundo y su esfuerzo por descentralizar el poder. Entre los futuros cardenales están el arzobispo de Lima, Carlos Castillo Mattasoglio; el de Santiago de Chile, Fernando Natalio Chomali Garib; el de Guayaquil, Gerardo Luis Cabrera Herrera, y el arzobispo de Porto Alegre, Jaime Spengler. También se encuentran el arzobispo de Tokio, Tarcisius Isao Kikuchi; el de Aviyán, en Costa de Marfil, Ignace Bessi Dogbo; el de Argel, Jean-Paul Vesco; el de la indonesia, Bogor Paskalis Bruno Syukur; el de Teherán, Dominique Joseph Mathieu; el de Toronto, Francis Leo; y el de Belgrado, Ladislav Nemet. Además, fueron elegidos los obispos de la filipina Kalookan, Pablo Virgilio Siongco David; el arzobispo de la ciudad italiana de Turín, Roberto Repole; el obispo auxiliar de Roma, Badassare Rena; el arcipreste de la basílica romana de Santa María La Mayor, Rolandas Makrickas; y el obispo de la eparquía de los Santos Pedro y Pablo de Melbourne de los ucranianos, Mykola Bychok.
Para Infobae, Nunzia Locatelli y Cintia Suárez